Tras un pliegue, lo blando. Un almanaque de gestos para enternecer el museo
Moverse por el museo como una masa. Menearnos juntis, sabiendo que no nos soltaremos, que a cada paso somos más blandis, más una misma cosa. Formar una horda de entrañablesas y trotar al unísono para que la mirada vibre, para provocar la derrota de la representación. Plegar una imagen y que de ella emerja un poema. Esta acción colectiva parte de una cartografía de deseos mutante e inacabada.
De la mano de Alba Mayol, Eva Fàbregas y Ariadna Guiteras, nos adentraremos en el imaginario de Mari Chordà como si fuese una poza inundada de posibilidades. Nos zambulliremos en él para escuchar su poesía arcana, para descubrir cómo se deforman las imágenes cuando todo se vuelve húmedo. Enlazadas por la voz de blanca arias, las cuatro artistas articularán un itinerario performático en el que, a partir de gestos propios de sus prácticas, nos invitarán a trazar los vínculos entre las artes y los feminismos, así como a ampliar y caldear su legado (est)ético. Esta actividad es un mujernaje libre, un ritual de agradecimiento y expansión, un intento de habitar el museo de forma blanda e interconectada, un ensayo para encarnar, finalmente, el pliegue.
