Mc City, Rosell Meseguer
Mc City propone Miami como laboratorio y síntoma del capitalismo estadounidense. La artista toma la ciudad no como postal sino como evidencia: un tejido de materiales, colores y formas que prometen comunidad y entregan fragmentación. Siguiendo a Koselleck, la Modernidad se mide por el desencuentro entre expectativas y experiencia; aquí, la promesa urbana se frustra en la incoherencia de casas y bloques, en una estética de competencia y exhibición donde la fachada prevalece sobre el cuidado común y el mantenimiento.
El proyecto contrapone Miami a la ciudad europea para visibilizar el exceso frente a lo que se vuelve invisible: los mecanismos de especulación, deseo y oferta del mercado. Durante 2010, 2011, 2014 y 2025 la artista compila archivos locales a partir del The Miami Herald, en diálogo con periódicos europeos, durante estancias en Oolite Arts Miami o el WOPHA Congress. Los titulares no solo informan; sitúan: cartografían barrios, fijan jerarquías y sedimentan capas numéricas, visuales y conceptuales.
La crítica alcanza al suburbio como modelo de falsa independencia: viviendas aisladas que dependen del coche, de normativas privadas y de infraestructuras que atan. Aquí los desperfectos no “embellecen” la ruina; son síntomas de individualismo y de la erosión del espíritu comunitario. Un coche europeo atraviesa la urbe miamense y la botánica de Florida, deambulando entre lujo y marginalidad, centro y periferia, ficción y realidad.
En espejo, la obra advierte cómo Europa replica estas lógicas: uniformidad sin tejido común, acumulación de capital y brillo superficial. Mc City reflexiona sobre esa deriva y nos devuelve la ciudad como un relato de ficciones posibles y de sus costes políticos.
